2007/08/30

LA RENOVADA GUERRA MEDIÁTICA DEL FÚTBOL

Te gusta el fútbol y te asquea la guerra mediática montada.
No sabes, ni quieres averiguarlo, de qué parte están en esta guerra Mediapro, la Sexta, Sogecable o Audiovisual Sport, como otros años estuvieron las Televisiones Públicas y Canal Plus y otros intermediarios de los que ya no te acuerdas ni falta que hace. Además, teniendo arte y parte prácticamente todos los medios de comunicación, haces un esfuerzo y lees solo los titulares de la guerra, sin pasar a la letra pequeña, entre otras cosas porque te va a resultar imposible saber con certeza la verdad, así que ni lo intentas.
Tú lo que quieres es ver los partidos del Madrid, en casa o en el bar, y que gane, y, a poder ser que ganen también el Sporting, el Oviedo, la Cultural Leonesa y el Lenense. En ocasiones sigues a otros equipos modestos, patrocinados o entrenados por algún amigo o conocido tuyo.
Ves también otros partidos y si se tercia disfrutas con un Barcelona-Atlético de Madrid. Incluso en ocasiones no te importa que gane el Barcelona y hasta disfrutas con las jugadas de Messi.
Ahora bien, por mucho que te guste ese ¿deporte?, con lo que estás en absoluto desacuerdo es con las cantidades que mueve, pero te preguntas qué puedes hacer para evitarlo. Puedes simplemente dejar de verlo y boicotear a los bares que retransmiten fútbol, porque yendo estás colaborando en que los precios sigan como están. No lo vas a hacer.
Te gustaría que el fútbol no oliera ni un céntimo de dinero público, ni de cadenas de televisión públicas, ni patrocinios públicos directos o indirectos. Sin embargo, los futboleros también votan. Y tampoco puedes ignorar la tupida malla de negocios que envuelve el fútbol: desplazamientos, agencias de viajes, comidas, hoteles, imprentas, servicios varios.
La globalización del fútbol tampoco favorece medidas restrictivas unilaterales de un único país. Al final, si los poderes públicos y las televisiones cortan el grifo a los equipos, sus figuras marchan a otros países, y el fútbol nacional perdería interés, con la correspondiente repercusión económica.
¿Qué harías tú si fueras el Presidente del Gobierno con mayoría absoluta, e incluso que todas las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos fueran del mismo partido, es decir, que tuvieras todo el poder asegurado y ninguna oposición?
Ni idea.

No hay comentarios: