2008/06/06

REZOS EN COVADONGA

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Ya de retirada, a eso de las nueve de la tarde o de la noche, esperando el ascensor, te encuentras con un vecino en el portal, que también se recoge con su perro, y lo dices con precisión.

Te cuenta que fue a Covadonga el otro día con su nieta y que te vio por allí, que comisteis en el mismo sitio, El Peregrino”, que te vio afuera hablando con unos y con otros. Le explicas lo del encuentro anual.

Subieron y bajaron varios vecinos y seguíais allí, junto al ascensor. Buenas noches, buenas noches.

Te dice que cuando terminaron de comer caminaron lentamente hasta la Cueva, que subieron las escaleras, que descansaron en el primer rellano, que continuaron y que la niña, de cinco años, se puso a rezar y que a él le cayeron tantas lágrimas que no había manera de parar porque la niña estaba pidiendo cosas.

- Hala, vamos, nena.
- No, todavía no terminé de pedir.

Preguntas:

- Pero ¿qué pedía la nena? si se puede saber.
- Me prometí que no se lo diría a nadie.
- Bueno, nada, nada, si ye un secreto, no me lo digas.
- Hace tres meses que nos divorciamos.
- No jorobes, nun sabía na.
- Y la hija también se divorció.
- ¿Qué tién, treinta años, va tiempo que nun la veo?
- Treinta y cuatro. ¿No ves cómo estoy, en los huesos?
- Si, la verdá ye que te vi un poco delgau, pero, mira, esos dos que acaban de subir, hacía tiempo que nun movían el coche del garaje y la mujer y yo pensábamos ¿tará malú? ¿quitarian-i el carné? porque nun lu veíamos. Un día pregunté-i y quedé como taba, así que munchas veces val más nun preguntar porque igual te dicen que qué te importa.
- Se marchó con el jefe. Y estoy yendo al sicólogo.
- Vaya ¡cuánto lo siento!
- Nos casamos a los diecisiete años, llevábamos treinta y cuatro casados. La hija marcho con otro y la mía igual.

Esas cosas pasan en el portal y tú sin enterarte, como de la operación de apendicitis de tu vecino de puerta, de la que supiste una semana después.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues sí, da pena, no saber nada de nadie, pero a veces, está bien, cuando no quieres que se sepa nada de la tuya...