Palabras de mi hermana en su funeral:
Es muy facil deslumbrarse hoy en dia por las sublimes ofertas que la sociedad nos brinda a diario donde prima la apariencia: queremos aparentar, alcanzar puestos relevantes, tener muchas cosas, apoyamos la ley del más fuerte....
Sin embargo, hay otra cara en la moneda. Esa cara es la tuya, amigo Joaquin, que no tuviste una vida exenta de dificultades, que trabajaste sin tregua todos los dias de tu vida, que nos apoyaste en multitud de ocasiones.... quizás sin habértelo compensado justamente.
Por eso quiero ahora agradecerte todas esas cosas porque al mirarnos hacia dentro nos damos cuenta de una gran leccion magistral que incluye la bondad y la prudencia seguidas de la fraternidad, y sobre todo por haber dado mucho sin pedir nada a cambio. Por todo ello, gracias. Adios. Hasta siempre.
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Y nadie me volverá a llamar Luismón.
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