2012/12/31

PREGUNTAR POR LA NOCHEBUENA

Quizá un seguidor de Sigmund Freud pueda encontrar una respuesta a tu caso, pero lo cierto es que una de las cosas que más te incomodan en estas fechas es cuando alguien pregunta (no directamente a ti, sino en conversación de grupo) dónde se va a pasar la Nochebuena o, con menor incomodidad, la Nochevieja.

Crees que en bastantes ocasiones se trata de una decisión difícil, con su ración de polémicas, reproches, tensiones familiares, buscando imposibles equilibrios donde, previa llevanza de una contabilidad histórica, hay que conjugar parentescos, distancias y logísticas varias.

No estás pensando en los casos de separaciones o divorcios. Al fin y al cabo, en estos casos la respuesta está, no en el viento, que diría Bob Dylan, sino en las detalladas sentencias judiciales que precisan quién y con quien pasan las Navidades los menores, decisión que necesariamente arrastra a mayores, tíos, abuelos y a los famosos cuñados. En estos casos como está casi todo decidido, el margen de discusión es menor. Curiosamente.

Piensas en esos casos en los que un matrimonio o pareja con padres vivos, que unos están en una residencia, otros en casa; unos hermanos cerca, otros lejos, unos con nueva pareja, otros a punto de cambiar, unos con casa o disponibilidad grande, otros con casa o disponibilidad pequeña. Te acuerdas de las familias numerosas con ramificaciones por parte y parte, donde es imposible que todos queden plenamente satisfechos. Habrá quien salga triunfante y quien derrame una secreta y furtiva lágrima. En fin, un aspecto muy complicado.

Si algún atento lector prueba fehacientemente que alguna vez sonsacas o preguntas a alguien dónde va a pasar o dónde pasó la Nochebuena o la Nochevieja, está autorizado a dar publicidad conveniente de tu fisgoneo para escarnio propio. Prometes que el comentario no será censurado.

Además de esa sanción de honor, tú mismo te flagelarás con otra pena gastronómica, consistente por ejemplo en la supresión durante seis meses de la sabatina botella de sidra y el correspondiente pincho de picadillo.

***

¡Feliz año!

2012/12/28

LOS RESÚMENES DEL AÑO


La prisa por eso que se dice de echar el año fuera se traslada a los resúmenes que la prensa publica estos días, incluso antes de terminar el año. Si ocurre algo a partir de Navidad queda en el limbo, de los justos o de los injustos, depende. Por ejemplo, si lees ese apartado anecdótico que muchos periódicos dedican a lo ocurrido tal día como hoy hace un montón de años, resulta que en 1908 sufrió Italia un terremoto con el resultado de setenta mil muertos en la región de Messina, que habrían quedado sin su lugar en el resumen anual de los periódicos de la época, si tal costumbre se hubiera implantado ya. Por el mismo motivo, tampoco la muerte de Ceaucescu quedó en ningún resumen anual, porque la ejecución ocurrió en estas fechas navideñas ¡cruel paradoja!

Como algunos blogs amigos también publicaron algo parecido a una autobiografía anual, no quieres ser menos. Repasas tus entradas y resulta lo siguiente:

-         82 comentarios personales (aunque personal es todo), algunos inspirados real o ficticiamente en El Fontán alrededor de una botella de sidra y un pinchu de picadillo.
-         42 sobre diversos asuntos políticos: Cascos, elecciones asturianas, huelgas, UP y D, fusiones de Ayuntamientos, los programas electorales, el juez Garzón prevaricador (¿asunto político, jurídico?), los gastos del Presidente del Tribunal Supremo, los desahucios, la Constitución.
-         24 son resúmenes de libros, lo que no quiere decir que hayas leído ese mismo número, porque algunos te sugirieron más de una idea: Pla, Tito Montero, Saramago, Julián y Javier Marías, Eurípides, Onetti, Torrente Ballester, Goehe, Miguel Rojo, Pérez de Ayala, Suetonio.
-         10 dieron una pincelada jurídica.
-         8 sobre el ferrocarril, normalmente con motivo de la preocupante fusión con FEVE.
-         5 se basaron actividades culturales como espectador o como jurado: conciertos, teatro, Cuentos Lena.
-         2 versaron sobre la actividad coral.
-         2 sobre la Iglesia.
-         1 resumió el viaje con el Coro a Italia.
-         1 trató algo de la genealogía.
-         1 el cuento de Navidad.  

Otro glosador clasificaría los mismos artículos con otros criterios. Nada te extraña, tú también manejas a tu antojo algunas estadísticas.

Total 178 y sin contar este resumen anual. Ni con esto queda cerrado el año, que eso depende del tiempo y de la inspiración, que si no llega, no llega.

Pertenecientes a distintos capítulos, se dedicó un recuerdo (normalmente valorando su lado bueno) a personas que nos dejaron este año: Fraga, Tapiès, Macrino Suárez, Carlos Fuentes, Chavela Vargas, Carrillo, Gómez Llorente, la hija de Tino el de Güelles, Tomás el de Fresneo, Joaquín el de Naveo, Aurora, Sito, Don Emilio, La Voz de Asturias (no es una persona pero también murió). También un breve recuerdo para el aniversario de la muerte de la inolvidable amiga Camino Astorga.

No todos los asuntos relevantes en lo general o en lo personal quedaron debidamente reflejados. Salvo alusiones de pasada o al hablar de los desahucios, la enorme crisis quedó intacta. El accidente (leve) de tu hija en una rotonda se tocó de refilón, elemental por otra parte. Poco más de una línea para dejar constancia de la inmensa (sin medida, por aproximación etimológica) dedicación de tu mujer a su empresa. Que este curso estás de excedencia en el coro tampoco lo habías anunciado, pero no sabías cómo afrontar la información para decir sin decir. Nada nuevo sobre la genealogía, pese a que le habrás dedicado no menos de setecientas horas anuales, que salen de redonder dos horas diarias. Tampoco sobre el acopio de fotos antiguas de Fierros, goteo que no cesa. Nada sobre el peso de la edad en ti y en los tuyos, por ser ley de vida.

Tiende uno a olvidar lo ocurrido en el primer semestre del año y a enfatizar lo de anteayer, de ahí que no destaques en este momento y lugar importantes alegrías del último mes. También echaste en falta en la comida del coro (es un derecho del personal en excedencia) a amigos en dolor económico. En la cena familiar de Nochebuena y estos días los tienes presentes aunque no te dirijas a ellos porque tampoco sabes qué decir ni cómo consolar. También te acordaste de los muertos y de sus familias, pero menos, porque lo que no tiene remedio no lo tiene.

Ninguna foto destacarías como foto del año. Contra lo que pudiera parecer, la mayor parte de las horas las habrás pasado durmiendo, en segundo lugar lo ocuparían las horas de trabajo, lo que daría lugar en cualquiera de los dos casos a imágenes de muy escaso interés. Para que no quede demasiado soso el artículo, colocas una foto que acabas de hacer sobre la pared, color verde esperanza, que no es lo peor.

2012/12/27

CIZAÑA, VERRUGAS Y MONSTRUOS

Un inmisericorde ejército de spammers está lanzando pertinaces ataques contra este humilde blog y no sabes qué estrategia defensiva utilizar.

Hasta hace unas semanas, de vez en cuando emergían en algunas entradas breves comentarios, normalmente en inglés, que ni molestaban ni te molestaban. El que llegara a ellos los saltaba porque se trataba no más que de molestas verrugas. Sin embargo, observaste que en las últimas semanas aumentaban esos spams, mensajes no deseados. Utilizaste varias tácticas, primero la del avestruz, como que no pasa nada, bah, son cuatro mensajes, que queden ahí, la gente quita fácilmente el grano de la paja, o ideas por el estilo.

El número de mensajes inoportunos fue creciendo. En general estaban asociados a  determinadas entradas, hasta el punto de llegar a preguntarte qué palabras clave habría encontrado el buscador automático de esos intrusos para conseguir volcar su porquería.

Como los mensajes amenazaban con invasión,  te dijiste que aquella cizaña había que eliminarla. Comenzaste a separar con delicadeza hoja a hoja, mensaje a mensaje, comentario a comentario. Era un trabajo artesanal pero válido como defensa ante una humilde guerra de guerrillas.

Cuando arreciaron nuevos ataques, aprovechando una utilidad del programa editor del blog, marcaste como SPAM una larga lista de mensajes, todos en lengua extranjera. Pasaron a la antesala de la papelera de reciclaje y acto seguido, fueron arrojadas al vacío. Craso error, porque en su apoyo acudió toda su maligna caballería. Seguramente habría que haber mantenido la mente fría y considerar que ya amainará la tormenta.

Quizá uno se impacienta cuando nacen las primeras canas, que se arrancan con la esperanza de que no se reproduzcan. Lo mismo ocurre con las rebeldes verrugas, otro tanto con esos antiestéticos pelos que los años hacen surgir de cejas, narices y orejas. Quizá la mejor técnica habría sido la que encontramos en el Quijote: Mejor no meneallo, pero ¿quien mantiene la mente fría ante tan insistentes ataques?

Asustaste al monstruo adormilado, se enfureció y, presa de insomnio, no cesa en sus ataques noche y día. Tal parece una embestida nuclear.

¿Habrá vacuna contra este cáncer metastático?

2012/12/21

LA MULA Y EL BUEY (Cuento de Navidad)

No tendría Xuanín más de siete años, pero estaba con la mosca detrás de la oreja, nada extraño para su edad por otra parte. Pasó inquieto las últimas Navidades porque algo había oído de que los Reyes Magos no existían, que eran pura invención.

Cuando llegó la noche mágica tardó en dormirse, pero al despertar encontró en los puntos de siempre un montón de paquetes de variados tamaños y colores. Antes de  romper las primeras cintas, envoltorios y papeles, abrió la puerta de casa y en el exterior quedaban restos de harina en un plato con señales evidentes de los lametones del camello asignado a su portal.

Eso fue el último año.

A primeros de diciembre las dudas de Xuanín aumentaron al oír en la tele una noticia inquietante: el Papa Benedicto XVI había proclamado que la mula y el buey no estuvieron en el portal de Belén. Para él, la mula, el buey y los Reyes Magos corrían la misma suerte. No concebía los unos sin los otros.

Durante el puente de la Constitución, Xuanín estuvo muy atento a la colocación de las luces navideñas en las calles de su ciudad. Todos los años eran diferentes. El Ayuntamiento tenía ocho o diez juegos de luces y banderolas que iba alternando para que parecieran nuevas. En los últimos años no ponían imágenes de nacimientos, ni de pastores, sino que representaban casas nórdicas, abetos, bolas intermitentes, trompetas, pentagramas,…pero él sabía que también había luces de mulas y bueyes, de reyes magos, de vírgenes y ángeles porque los había visto en fotografías antiguas en blanco y negro.

Estuvo especialmente atento por si esta vez tocaban la mula, el buey y los reyes. Presenció cómo los operarios, subidos a los camiones-grúa, iban colocando la iluminación navideña cada treinta o cuarenta metros. Decepción, este año tampoco estaban la mula, el buey ni los Reyes Magos. Se puso en lo peor, pero quedaba un rayo de esperanza. Estaría al tanto del nacimiento que todas las navidades se colocaba en su casa.

Para evitar polémicas, aquella familia había pactado desde siempre la coexistencia pacífica del árbol y el nacimiento. En esa labor se repartían las tareas. El padre preparaba la infraestructura: la maceta, el árbol, la preinstalación eléctrica; el musgo, el río de plata, los caminos de arena. A cargo de la madre quedaban las figuras principales: la Virgen, San José, el Niño, los Reyes Magos, la mula y el buey. Dejaban para Xuanín todo ese ejército de personajes tan secundarios como entrañables: los pastores, los artesanos, las lavanderas, y hasta el simpático caganer. También eran cuestión suya las bolas, las estrellas, las guirnaldas y, no siempre con acuerdo, el papá Noël.

Dónde iban a parar las figuras desde la noche de Reyes hasta las navidades siguientes era un secreto que los padres guardaban celosamente.

Como siempre, la tarde del último viernes antes de las vacaciones navideñas, el nacimiento quedó casi rematado, pendiente de que Xuanín lo completara situando a su gusto los patitos, las pitinas, las ovejas, los pastores…

El último día de clase Xuanín estuvo especialmente nervioso. El profesor le preguntó:
-         ¿Qué te pasa, Xuanín? Te encuentro un poco revoltoso.
-         Es que quería preguntar una cosa y no me atrevo.
-         Pregunta, pregunta, no te cortes.
-         Oí en la tele que el Papa dijo que en el portal de Belén no hubo ni mula ni buey.
-         Es una tradición muy guapa que necesitaría una explicación pero al hablar de tradición se me olvidaba otra costumbre antigua. Había un dicho en latín que decía así: “Prima non datur, última dispensatur”, que quiere decir que la primera clase no se da y la última se dispensa. Como hoy es el último día, podéis marchar. Xuanín, recuérdame lo de la mula y el buey en la primera clase del año que viene. Feliz Navidad a todos y que os traigan mucho los Reyes.

Pies para qué os quiero, Xuanín marchó volando para su casa. El profesor no aclaró sus dudas, pero había hablado de los Reyes. La esperanza no estaba perdida.

Al llegar a casa, fue directo a ver el nacimiento. Allí estaban la mula y  el buey, así que los Reyes Magos acudirían  puntualmente a su cita.

2012/12/19

LA LOTERÍA DE NAVIDAD

Te parece que no eres supersticioso, o no muy supersticioso. No lees el horóscopo, no sales a la calle aposta con el pie derecho, ni cuelgas en casa ajos o herraduras, ni estás atento a gatos negros, y si procuras no tirar sal o romper un espejo es más por no coger la escoba que por miedo a inconcretos males venideros.

Por lo mismo, tampoco eres un vicioso de la lotería. Juegas únicamente por los compromisos, algún intercambio, alguna participación por aquello de no decir que no. También por colaborar con asociaciones recreativas o culturales de amigos o conocidos o de sus hijos. Incluso cuando juegas, puestos a pedir, deseas que no te toque una millonada, nos vayas a crear enemistades por expectativas de reparto que no se logran.
 
Sin embargo, si te hacen el encargo de traer lotería navideña de un bar donde paras algunas veces y lo cumples, tampoco estás obligado a coger un número para ti, pero eso de que la suerte pase por tus manos y la dejes escapar... Te dijiste que no eras supersticioso, así que te mantendrías en tus trece (trece ¿una superstición?) y no cogerías esa lotería. Los días siguientes seguiste parando y allí permanecían colgadas la tira, la pinza y los décimos. ¿Y si suena la flauta habiendo tenido el número en el bolso? El caso requería una excepción. El próximo día pedirías un décimo.

Llegado el día y la hora, miras los distintos estantes del bar y no hay asomo de lotería. Habían volado. Tampoco preguntaste por ellos, si los tenían guardados, si iban a pedir más a la administración, no querías pasar por un vicioso o un supersticioso de la lotería.

Te niegas a pensar que lo eres, pero a lo mejor te tienes que aplicar aquel chiste:

¡Maricón ya tenemos! Solo falta una oportunidad.

2012/12/18

CONTRA EL PLAN (SUBTERRÁNEO) DE VÍAS DE GIJÓN

Ves con tristeza y resignación los derroteros que está tomando la nueva actualización del plan de vías de Gijón, el famoso metrotrén.

Por resumir, existió un plan para construir un ferrocarril suburbano en Gijón de manera que las vías, que morían en la Plaza del Humedal, pudieran llegar hasta la zona de El Molinón o incluso hasta Viesques (zona este de la villa) como punto máximo. Después de los dibujos más optimistas, llegaron los recortes y en esas estamos con buena parte del túnel perforado, pero poco más.

Al entorno de la estación del Humedal llegaban trenes sobre dos  anchos de vías, el métrico de FEVE y el ibérico de Renfe, que siguen llegando a la bautizada como estación provisional de la calle Sanz Crespo. Qué ancho de vía colocar en el túnel no es cuestión sencilla porque, construido el túnel para dos vías, caben cuatro posibilidades:

A)    una vía métrica y otra ibérica, con lo que entrarían tanto trenes de Renfe como de FEVE, pero en vías únicas independientes, con la ventaja de que los viajeros no necesitarían transbordar a su llegada a Gijón, y el inconveniente de que se resentiría la fluidez del tráfico ferroviario por el embudo que implica toda vía única ante cualquier incidencia en el tráfico.
B)     Dos vías métricas, con lo que los trenes de FEVE llegarían hasta el final, pero los viajeros de Renfe se apearían en la primera estación de la ciudad y tendrían que transbordar si su destino era hacia la zona de El Molinón.
C)    Dos vías ibéricas, con el resultado contrario a B.
D)    Dos vías con tercer carril, que permitirían la circulación de ambos trenes y ambos anchos. Es la solución más positiva para el viajero, que no necesita cambiar de medio, pero la más cara por la complejidad de los sistemas de seguridad y de la fuente de alimentación, ya que los trenes de Renfe y los de FEVE se nutren de voltaje diferente.

Como ya se filtró a la prensa, no cometes ningún pecado si afirmas que la opción elegida, la B sobre la C, se basa en planteamientos totalmente erróneos en tu opinión. Asegura el informe de la consultora que la elección se apoya en dos datos: PRIMERO.- el menor coste de mantenimiento del ancho métrico tanto en infraestructuras como en superestructura. SEGUNDO.- que confluyen en Gijón tres líneas de ancho métrico y solo una de ancho ibérico.

No discutes, porque no lo sabes, en qué medida es más caro el ancho ibérico. Por pura proporcionalidad de anchos es posible, aunque te imaginas que la diferencia será mínima. Alguien más documentado podrá opinar con más fundamento. Sin embargo, el segundo argumento es una falacia, algo realmente peregrino, porque la poblaciones y entornos servidos por la única línea de Renfe (Lena, Mieres, Oviedo, Lugones, Llanera), aporta a Gijón más del doble de viajeros que las tres líneas de FEVE juntas: la de Avilés, la de Laviana-Langreo, y la fallida de Oviedo, que transcurre por territorios más despoblados que la de Renfe y muere en Oviedo-Uría sin llegar a Llamaquique.

Todo ello sin entrar en otras consideraciones como la rapidez o la fiabilidad, que se pueden mejorar con inversiones.

Alguien podría pensar que defiendes tu ferrocarril, tu ancho. Podría ser planteamiento mezquino e interesado en otro tiempo, pero a punto de ejecutarse la fusión Renfe-FEVE para el venidero año, cuando caeréis todos en el mismo pozo, lo que defiendes es tu ferrocarril, el ferrocarril. Con la opción a favor del ancho FEVE y las consabidas reticencias del viajero asturiano a los transbordos, significará la puntilla del transporte ferroviario de viajeros de Cercanías en Asturias.

Al tiempo.

PROTOCOLO Y CONTINUIDAD

Asistes en la iglesia de Pola de Lena al funeral oficiado por el alma de Luisa, antigua vecina de Puente de los Fierros. Es imposible olvidarla, por muchos motivos, por  ejemplo porque como mareas los ficheros de fotos en tu ordenador, cada dos por tres aparece en pantalla alguna foto tuya con aquel jersey de rombos marrones y blancos que ella tejió.

Aparte de tejedora, Luisa fue muchas cosas que desconocías, por lo visto catequista durante algún tiempo. Al hilo de esa  circunstancia el párroco diseñó una ceremonia con un toque original. Para controlar los tiempos, preparó una introducción tan extensa que parecía que sustituiría a la homilía.

En realidad estaba mmidiendo los minutos para que cuando llegara la hora de la homilía asomaran por la iglesia unos párvulos que tú bien pensaste que iban a ver el nacimiento de enormes figuras colocado a lo largo de un pasillo lateral. Sin embargo, cuando acabaron de concentrarse en la cabecera del pasillo, el cura se dirigió a ellos para explicarles que el funeral que se estaba celebrando era por una antigua catequista, que no lo había sido del antiguo párroco, el mítico y recordado Don Leoncio, sino de la Iglesia. Rezaron un extemporáneo Padrenuestro, salieron y el párroco continuó.

No sabes de qué más habló porque tú comenzaste a meditar sobre el significado y la trascendencia del protocolo y de la ruptura del protocolo. El rey Juan Carlos, con sus famosas salidas, se granjeó la simpatía de muchos ciudadanos. Son improvisaciones, o no tanto, que ayudan a conservar una institución en la medida en la que impulsan una evolución que impide el anquilosamiento.

Rompiendo el protocolo litúrgico, el cura mandó un mensaje sobre la continuidad de la Iglesia como institución. O eso quisiste entender.

2012/12/17

EL PREVARICADOR TAMBIÉN CUMPLIÓ

El tiempo pasa y la imagen que conservas de aquella campaña de prensa se difumina, pero crees que se trataba de propaganda pagada por el Ministerio de Justicia. Consistía en anuncios a toda página con la imagen de un ya ex recluso portando sus pertenencias en un macuto o una bolsa en el momento de traspasar las verjas de la cárcel camino de la libertad. El lema era algo así como: CUMPLIÓ, NO LE CONDENES.

Te acuerdas muchas veces de esa imagen, pero ese mandato dirigido directamente al raciocinio de cada uno es de difícil cumplimiento porque ¿cómo se olvidan algunos recuerdos?

Piensas en el recién condenado alcalde de Cabrales, que lo fue a la pena de inhabilitación para cargo  público electivo municipal de resultas de prevaricar por haber permitido u ordenado que su Ayuntamiento cotizara a la Seguridad Social por otro concejal para que pudiera ir devengando unos derechos que no le correspondían. Pero con llamarte la atención esa maniobra tan burda, lo que realmente te sorprende es que en los noventa ya había sido inhabilitado por desobediencia al ignorar una orden judicial que obligaba al Ayuntamiento a conceder una licencia de apertura a una gasolinera. Se creía el amu, exactamente como ahora. “No me pillan, y si me pillan no pasa nada”, habrá pensando desde entonces.

Ante un delincuente reincidente en delitos violentos, a veces la sociedad puede hacer algo, otras veces nada. Si un hombre es condenado a veinte años por matar a su cónyuge, cuando salga en libertad, ese delito concreto puede sortearse no volviendo a contraer matrimonio con él. Puede matar a otra persona, pero no a otro cónyuge.

Sin embargo, la sociedad tiene en su mano impedir la reincidencia en la inhabilitación para un cargo público: no incluyendo los partidos a personas así en sus listas. Si, con la terquedad que se supone, los partidos se empeñan, los ciudadanos todavía tienen la oportunidad de no votarlos. Pero los votarán/votaremos porque incluso ahora mismo la sociedad cabraliega se mantiene dividida ante esta segunda condena del alcalde.

Volviendo a la imagen del recluso que sale en libertad, esta situación del alcalde te plantea una duda. Cumplida aquella condena por inhabilitación ¿puede la sociedad, en este caso sus votantes, condenarlo al ostracismo político, impedirle que vuelva a ser concejal o alcalde?  Si se da una oportunidad (obligada, por otra parte) al delincuente clásico ¿por qué negársela al político prevaricador si al fin y al cabo al ganar las elecciones limpia también el pecado original?

Ahí están Camps, Berlusconi y el asturiano.

Las siempre difusas fronteras entre la ética y la política.

2012/12/14

WWW.LNE.ES

(dedicado a Juan Luis González, de Xomezana y OTECAS)

Por si el sábado no podías ir al Fontán a cumplir con el vicio de costumbre o a la costumbre del vicio, te anticipas el jueves y convalidas la rutina: botella de sidra, pincho de picadillo y lectura de La Nueva España, esa Nueva España que a veces te sirve de vía de escape para descargar la ración de bilis, pero a la que tanto tienes que agradecer por lo que te estimula en divagaciones varias e intrascendentes.

Te ocurre como con aquel programa de televisión que trataba sobre la ídem “Y sin embargo te quiero”.

En el plano ideológico, como crees escuchar sin orejeras, valoras su pluralidad aunque muestres predisposición conocida a mirar con cara de risa hacia un lado. Si en las informaciones alguien se percata de algún sesgo, haces como que te pasa desapercibido, salvo en el visceral anticasquismo y antiforismo. Allá ambos dos, Cascos y LNE. Como ejemplo de rara pluralidad encuentras dos comentarios bien contrapuestos sobre el mismo asunto, lo del ministro Wert con el catalán.

Pedro de Silva, desde su experiencia política, ofrece una versión casi siempre brillante:
Esto fue durante el segundo culete.

Muestra una opinión contrapuesta Luis M. Alonso, firma de creciente peso en el periódico, por motivos de todo tipo (uno también tiene derecho a ser críptico, no solo los columnistas políticos).

Esa contraposición te pilló en el tercero. El pincho había caído con el primero, que mientras se come no se lee, salvo la buenísima viñeta.

Para el cuarto estabas leyendo una información sobre la cofradía de La Balesquida, noticia marginal y simpática, reflejo de cómo la vida avanza y se resiste a abandonar los viejos moldes, cómo las instituciones quieren seguir siendo las mismas cambiando dependo cómo, depende si, depende cuándo.
(Desapareció el enlace de Internet).

Durante el quinto leías que el promotor hostelero Miguelo inaugugaba el día de autos, es decir el día 13, “el restaurante-sidrería El Antiguo en el local donde durante 23 años estuvo El Raitán”. O hay otro Raitán o un error en fechas, porque terminada la botella te desviaste hasta El Raitán que tú conoces en la antigua Plaza del pescado y a las tres de la tarde seguían el rótulo y el menú degustación tradicional al precio de treinta euros, incluídos IVA, agua y pan ¿y vino? El vino no aparece incluido. Y no se puede compartir el menú, según leíste en la lista de precios. La noticia o el comentario se publicaría al único efecto de seguir la malicia de que los periódicos solamente cuentan mentiras.

Durante el sexto culete o culín te enterabas de que la Junta General del Principado, en documentada réplica, sale al paso de correos y comunicados tendenciosos que la acusan de subirse los sueldos cuando todo el mundo se aprieta el cinturón. La Junta se acoge al derecho de rectificación y LNE lo publica en lugar destacado, sin retintín y con un titular aséptico.

Durante el séptimo y último (contra la ortodoxia del número de culetes por botella) ves el retrato, muy aplicado, de tu ex compañero seminaril Juan Luis González, que comparece por el sindicato independiente (es decir, independiente de grandes partidos) OTECAS. Se le ve aplicado leyendo unos papeles, como corresponde al personal de enseñanza, pero la foto y el titular son para la FADE, mas guapos y mediáticos, seguramente por ser más pesados y/o por tener más peso. Nada se dice de Juan Luis ni de OTECAS pero ahí estaban.

No hubo tiempo para más.

Cuando ya de vuelta a casa seguías dándole vueltas a la noticia de la cofradía y al motivo último de los cambios sociales y vitales, a cien metros de la capilla de Balesquida, en una nueva tienda tan próxima a la catedral que se refleja en sus escaparates, veías su rótulo, lo que te sirve para seguir meditando alrededor de los factores de los cambios: factores ideológicos, morales, económicos o puramente comerciales como en este caso, porque mira que llamar “The cathedral store” a esa tienda a veinte metros de la Santa Iglesia Catedral Basílica Metropolitana Catedral de Oviedo…Sí, seguramente el trasfondo económico es el sustrato y el motor de casi todo y los principios morales son livianas chinitas en el girar del mundo.

2012/12/12

TITULARES

Seguramente no harás nada distinto al resto de la gente que, cuando lee los titulares del periódico, espera que resuma básicamente el contenido de la información que desarrolla en el interior. Así, si lees que Oviedo editará la obra completa de Feijóo, que arranca con “Las cartas eruditas”, supones que alguna institución de Oviedo publicará las obras del clérigo y que la primera será precisamente “Las cartas eruditas”. Oviedo puede ser el Ayuntamiento, puede ser un Consorcio, pero como titular es suficiente.

Si lees el cráneo de la osa Petra, usado para clases prácticas en Biología, también te queda claro de qué se trata, de la osa Petra que vivió enjaulada en el parque San Francisco para delicia de generaciones, y das por supuesto que se utilizará en la Facultad de Biología, o bien en una asignatura de Biología de otra Facultad. Si te interesa la noticia, vas a la página correspondiente y completas la información.

Si uno es  profano en la materia, como se es de casi todo, y lees la supresión de los trenes semidirectos alarga el viaje entre Gijón y Oviedo siete minutos ¿qué se entiende? Con seguridad no lo que se encuentra en el interior, y el primer titular ahí sí es exacto, pero quizá el periódico quiere compensar con una portada engañosa el no haberse enterado de una noticia de hace dos meses, que otros medios sí publicaron.

Cuestión diferente es por qué se suprimen esos y no otros, y ahí sí estás radicalmente en desacuerdo. Mismamente ALSA no recorta los servicios directos por la autopista.

2012/12/11

CUANDO EL PRÓLOGO COMPITE EN INTERÉS CON EL LIBRO

Comienzas a leer la Vida de los Doce Césares de Suetonio, pero no entras bien en materia y te haces un lío entre el Senado, los cónsules, los patricios, los tribunos, los comicios, los censores, el pretor…y eso que estuviste en Roma hace unos meses, pero se conoce que estabas más atento a las pizzas que a la historia y a las ruinas del Foro.

Como introducción, decides releer un muy ajado libro “Lecciones de Historia del Derecho Romano”, de Pablo Fuenteseca, libro de texto que en su día estudiaste con dificultad y hastío. Sin embargo, ahora, sin necesidad de memorizar, simplemente por el placer de saber y entender, es una delicia, quién lo iba a decir. Ya te pasó con otras materias, de mano áridas. En realidad todo puede ser árido y dulce según nos pillen el cuerpo y el paso del tiempo.

Al llegar al estatus de los patricios y los plebeyos en tiempos de la República, encuentras que el problema de los créditos no es de ahora…así lo describe Fuenteseca.

“Otra faceta importante del desequilibrio económico en relación con el régimen jurídico del crédito era la penosa situación del deudor, generalmente plebeyo. El deudor insolvente caía en manos del acreedor, que se permitía con él disposiciones como encarcelarle, venderle como esclavo o incluso si eran varios los acreedores matarle y repartirse su cuerpo. A veces, también, encontramos a los deudores, denominados nexi, en estado de semiesclavitud. El nexum es una institución jurídica arcaica, por la que una persona queda ligada de modo material con su acreedor. Es un reflejo de una sociedad primitiva, que nos pone de manifiesta este problema del crédito en aquellos tiempos de enconadas luchas entre patricios y plebeyos”.

No sabes si Suetonio, al hablar de las medidas de Julio César para con los deudores, hablaba de entonces o de ahora mismo.

“Los acusados, las personas ahogadas por las deudas, los jóvenes pródigos, encontraban en él su único sostén, siempre a su disposición, a menos que el peso de sus crímenes, de su miseria o de sus excesos fuera demasiado grande para que pudiera socorrerles. En estos casos les decía llanamente que necesitaban una guerra civil.”

2012/12/10

VUELTA A LA TIERRA

Dicen los paisanos, y no a raíz de esta crisis sino antes, que tarde o temprano habrá que volver a la tierra.

En El Entrego lo están pensando en serio. No otra interpretación cabe de la noticia, entre simpática y bufa, de que el malogrado y nunca inaugurado Centro de Estudios Medioambientales se va a derruir y su solar se parcelará para convertirlo en noventa huertos de sesenta metros cuadrados.


El centro de estudios medioambientales es uno de las decenas de fallidas instalaciones que se construyeron en Asturias en los últimos veinte años.

Serán unos huertos modernos, con estatutos, taquillas, duchas, licencias fiscales, plan de prevención de riesgos laborales, pasillos practicables, palotes de polietileno o poliuretano, posturas ergonómicas y otras modernidades.

En fin, la nueva agricultura.

2012/12/09

BELARMINO Y APOLONIO, de Ramón Pérez de Ayala

(Este paréntesis se leerá al principio pero tú lo escribiste al final. Este artículo sobre Belarmino y Apolonio salió más largo de lo acostumbrado. Podrías utilizar la corruptela administrativa del fraccionamiento de los contratos, como cuando las atribuciones no permiten adjudicar un contrato si supera X euros y partiéndolo en dos se evita otro concurso o que deba que adjudicarlo una instancia superior. Tú podrías dividir esta farragada en dos artículos, pero prefieres contarlo de una vez, aunque resulte empachoso).

Habrán pasado no menos de treinta y cinco años desde la primera vez que leíste Belarmino y Apolonio. El libro no era tuyo y alguien te lo tuvo que prestar porque no recuerdas haberlo sacado in illo tempore de ninguna Biblioteca, a diferencia de la ocasión actual. Tampoco es baladí que lo hayas leído a los dieciséis años o a los veinte. En el primer caso estarías todavía en el Seminario, en el segundo ya fuera. En la primera hipótesis te lo habrá dejado algún compañero de aquel entonces y aquel ambiente. Supones que el libro te habrá impresionado en aquel tiempo. Si fue más tarde piensas que habrá sido algún amigo estudiante de Filosofía y Letras, con la (repites, con la) que tuviste algún escarceo. Salvo que te gustó mucho entonces y que te pareció original, no recordabas absolutamente nada más, únicamente que Belarmino y Apolonio eran dos zapateros que andaban todo el día a la gresca. Bien poco poso en la memoria para novela tan interesante. 

Los buenos libros son susceptibles de múltiples lecturas e interpretaciones. Cada lector puede sentirse más identificado con un personaje, con una situación, a veces no siempre con los mismos si en el transcurso de los años llega la ocasión de una segunda lectura.

Coincidiendo con las primeras páginas de esta relectura se dio una casualidad. No sueles tomar café después de comer pero cada dos o tres meses el cuerpo te pide un café y una copa, concretamente de coñac. A la puerta del bar, el mismo donde tomas el café de media mañana, coincides con un abogado ovetense al que conoces desde la Facultad. Después de departir unos minutos en la misma puerta acerca de las tasas judiciales y otros asuntos de actualidad, como ibais a lo mismo sin saberlo, compartisteis mesa y charla. Además de coincidencias genealógicas, salió a colación tu pasado en el seminario. Te preguntó por qué lo habías dejado y si quedaba algo de aquella religiosidad. Le respondiste con una frase que acababas de leer en Belarmino y Apolonio.

“Hay dos espectáculos que el hombre debe presenciar alguna vez: uno es la salida del sol; otro es un parto. El primero nos enseña a respetar la idea de Dios; el segundo a respetar a la mujer”.  Como este blog se subtitula comentarios no demasiado íntimos, ese lema incluye también la intimidad de los demás y ahí terminas ese parte de la historia, pero es fácil que en lo sucesivo Belarmino y Apolonio sea el libro que estabas leyendo cuanto tomaste aquel café y aquella copa de coñac con aquel conocido abogado. Quedan estas líneas para recordarlo.

Todavía no habías llegado a la página en la que se define la religiosidad de Belarmino, que sirve para la tuya: “Si no un incrédulo, cuando menos era un tibio.”.

La novela contiene reflexiones interesantes acerca del llamado hecho religioso. Por ejemplo, como en la pensión donde se desarrolla algún capítulo de la novela sorprendieron a un cura saltándose la vigilia, él se descarga con argumentos bien originales, pero que dan que pensar.

“Para las personas de bien afirmada fe y claro sentido, sean clérigos, sean seglares, huelgan estas obligaciones disciplinarias; lo esencial es el dogma. El Estado concede de buen grado la libertad de ideas porque el pensamiento no delinque, pero no transige con la libertad de acciones, porque romperían la disciplina. La Iglesia es intransigente en materia de ideas y tolerante en materia de acciones: sólo el pensamiento peca. Todos los pecados, por monstruosos que sean, reciben absolución en el confesionario; pero la más mínima duda del confeso en materia de fe nos impide absolverlo. Ahora bien: como todo este es de sentido común, debe permanecer en secreto para los que no tienen sentido común, sean clérigos, sean seglares”.

Por lo demás,  Belarmino “hablaba en una lengua perfectamente insólita, que no era ni lengua viva ni lengua muerta, sino lengua en embrión.” 

A ti, que tanto te envuelven las palabras, no es de extrañar que te entusiasmara Belarmino, el zapatero de la palabra. Esta era su técnica: “A Belarmino le gustó la voz expeditivo, y la almacenó en la memoria, a fin de meterla en la horma, ensancharla y darle un significado espacioso, nuevo y conveniente”. Por eso al cosmos lo llamaba diccionario y al diccionario cosmos. Por lo mismo, para el zapatero filósofo y filólogo, vivir, conocer y crear eran sinónimos.  Sus conciudadanos no sabían si creerle o tomarle el pelo. Para acreditar su identificación entre palabra y zapato, avanzada la novela “Belarmino abandonó la profesión filosófica y ya no remendó más zapatos”.

-         ¿Y en qué habla?
-         Anda, pues en filósofo. Todos los filósofos hablan una lengua especial.  

También estabas en esta lectura de Belarmino y Apolonio cuando reapareció Simita, hasta entonces meramente un nombre de lejanas referencias. (Puede leerse la entrada y http://sipiluchi.blogspot.com.es/2009/06/amores-juveniles.html los últimos comentarios).

Ese retorno da sentido a otros pasajes de la novela.

“¿Cuántos se habrán encaminado al Seminario siguiendo una voz interior persuasiva, una estrella ineludible? Yo les oía contar chascarrillos de curas de aldea, de lo muchos que tragaban, de lo majamente que vivían. ¿Tenía yo vocación? No sé si por reacción y enojo contra mis compañeros, llegué a estar convencido de sentir una gran vocación. A ratos soy muy sentimental. Entonces, lo era mucho más. Los oficios canónicos, las ceremonias del culto, el canto del órgano, el resplandor de las luces, el misterioso recato de las imágenes; todo esto me enternecía y agitaba hasta los posos del alma, y tanto más en la medida que iban entendiendo el latín”.

“Mi trato con Angustias era del todo inocente. Mi pasión no se me hizo patente hasta el cuarto curso del seminario”.

Belarmino y Apolonio es una novela muy entretenida pese a cierta complejidad del discurrir temporal. La historia no es lineal sino que, al decir, de algún crítico prologuista, está distribuida a saltos entre el pre-pasado remoto, el pasado próximo y hasta el post-pasado próximo. Tela.

Por faltar, no le falta a  Pérez de Ayala ni un pequeño homenaje a Buridán.

“El símbolo del hombre fue el jumento de Buridán, que poseía una vislumbre o premonición de inteligencia discursiva, y por eso mismo murió de inanición entre dos montones de heno, dudando por cuál decidirse”.

Esa misma duda la tienes tú a la hora de colgar este comentario ¿Animará a la lectura de la novela o supondrá un vade retro, Satanás”?

2012/12/07

LAS CÁMARAS

Hay estos días en la prensa local algo algo de polémica  por la colocación de cámaras para controlar el tráfico en las calles peatonales de Oviedo. Como el coche, además de un elemento de ostentación, es una prolongación del individuo, hay quien defiende que es merecedor de los mismos derechos que las personas, incluidos los derechos fundamentales al honor, la intimidad y la propia imagen.

No alcanzas a ver, salvo que se trate de ejercitar la oposición porque sí, qué diferencia existe entre un control a través de policías uniformados o un control a través de medios técnicos, hoy cámaras, mañana lo que se puedan inventar. Si se realiza únicamente a través de agentes, por desgracia la experiencia demuestra que como no veas un chaleco azul, ancha es Castilla y transitable la calle peatonal. Los partidarios de respetar las normas de tráfico, de reservar las calles peatonales para el uso previsto agradecerán la colocación de las cámaras.

Sería curioso que una grabación presuntamente ilegal colocada en una calle no se pudiera utilizar para probar una infracción de tráfico (una minucia al fin y al cabo) y sí valiera como elemento probatorio ante un delito grave ¿o para denunciar un homicidio tiene necesariamente que verlo un testigo con sus propios ojos?

LA CONSTITUCIÓN

Por aquello de ir a contracorriente, el obligado comentario anual sobre la Constitución lo dedicas al elogio de políticos y juristas, tanto monta, en particular a los juristas políticos o a los políticos juristas, al menos a los de que durante la Transición dedicaron su tiempo a elaborar, discutir y pulir el anteproyecto de Constitución hasta terminar en el texto que entró en vigor a finales de 1978.

La Constitución es un texto político y es un texto jurídico. Como texto político pasa por ser el consecuencia y emanación de la voluntad popular, pero no te parece del todo cierto. Es resultado, sobre todo, de la voluntad de los políticos de entonces, que caminaban unos cuantos metros por delante del pueblo, muchas veces braceando contra su incomprensión. El pueblo, como sucede con las demandas no directamente monetarias, siempre alega que hay otros problemas más urgentes que elaborar una norma política.

Como texto jurídico de un Estado de Derecho, la Constitución es la norma suprema. Su calidad técnica es admirable. Es concisa y es precisa. Pocas palabras tiene de más. A veces se lee demagógicamente por desconocimiento, por ejemplo cuando ante la lacra de los desahucios se esgrime el tenor literal del artículo 47: “Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada”. Se pasa por alto que ese artículo pertenece al capítulo III de la Constitución y si vamos al artículo 53.2 se puede leer que los derechos reconocidos en ese capítulo “sólo podrán ser alegados ante la Jurisdicción ordinaria de acuerdo con lo que dispongan las leyes que los desarrollen”.

La regulación más deficiente de la Constitución, en tu opinión, la encuentras en lo referente a los Estatutos de Autonomía, pero con las tensiones políticas de entonces seguramente se hizo lo máximo que se pudo. Es muy posible que si se elaborase hoy, sus imprecisiones serían todavía mayores por falta de consenso. Ante tan encontradas discrepancias políticas, poco puede hacer el jurista.

Un brindis por la denostada clase política y la laya jurídica (de entonces).

2012/12/04

PERDÓN POR LA AUTOCITA

http://sipiluchi.blogspot.com.es/2010/03/el-empresariado.html

PLEBISCITOS

Correos, en tu opinión, demagógicos inundan las redes preconizando (¡Dios, qué palabra tan fea!) cuestionar y someter a plebiscito las medidas gubernamentales que más pueden afectar, es decir, perjudicar al ciudadano.

Otros cientos de mensajes advierten de la inutilidad de la clase política. No serás tú quien reenvíe ni uno solo de esos correos de descalificaciones genéricas. Los parlamentarios llevan a cabo una labor inmensa, normalmente ignorada pero medios hay de conocerla, sin ir más allá, entrando en las páginas web del Parlamento.

Aconsejas entrar en este enlace


Claro que leer desde la página 18 a la 37 requiere un esfuerzo y es mucho más fácil esbabayar, descalificar genéricamente a la clase política y dar al botón de REENVIAR sin un mínimo esfuerzo de meditación. No será tu caso, lo cual no quiere decir que comulgues con todos y cada uno de los parlamentarios democráticamente elegidos.

Especialmente relevante te parece la intervención del diputado de UPyD.

2012/12/02

CANTINELA

Lees que una de los mayores motivos de queja de los profesores universitarios es el reducido bagaje de conocimientos con que llegan los alumnos a la Universidad.


Te suena. Era frecuente que en el bachillerato los profesores adujeran lo mismo.

-         ¿Pero no os enseñaron el teorema de Pitágoras? ¿De verdad que no os hablaron del presente histórico?

Nada nuevo, en el Bachillerato Elemental se quejaban del déficit de conocimientos de la escuela; en el Superior, del Elemental.

Como las monedas tienen cara y cruz, esos profesores universitarios que se lamentan ahora de Bolonia y anteriormente de otros planes pretéritos, también tienen que escuchar las quejas de las empresas y otras instituciones, para las que nunca salen los estudiantes suficientemente preparados de la Universidad para el concreto puesto que se necesita cubrir en cada momento.

Mal argumento echar la culpa al pasado, al académico y al político. El latiguillo, cuando es recurrente, no revela sino incapacidad e impotencia para afrontar la realidad.

¡Qué suerte tener a mano una herencia recibida como chivo expiatorio!